El Gobierno de la Ciudad de México cuenta con recursos por 9,500 millones de pesos (mdp) en el Fondo de Atención a los Desastres Naturales en la Ciudad de México (FONADEN), creado en 2015, con Scotiabank como fiduciario.
Los 9,500 mdp se reportaron al cierre de junio de 2017, de acuerdo con el Informe de Saldos y Movimientos del fideicomiso que respalda al fondo, publicado por la Secretaría de Finanzas de la Ciudad de México.
“Ante una contingencia epidemiológica o desastre natural se contará con recursos que podrán ser canalizados inmediatamente a las necesidades más apremiantes”, refiere la dependencia local.
Un decreto en 2014 estableció que 30% de los remanentes del gasto del entonces Distrito Federal se destinarían a un fondo "para la atención de contingencias y emergencias epidemiológicas y desastres naturales, así como a mejorar el balance fiscal".
El gobierno de Miguel Angel Mancera anunció la creación del Fondo en octubre de 2015 con 3,000 mdp, de los cuales 2,100 mdp se destinarían a contingencias económicas y 900 mdp para la atención de emergencias por desastres naturales, según un comunicado oficial.
El 10 de junio de 2015, se publicaron en la entonces Gaceta Oficial del Distrito Federal las reglas que regulan la composición, manejo, destino del Fondo para Estabilizar los Recursos Presupuestales de la Administración Pública del Distrito Federal, también identificado como Fondo de Atención a los Desastres Naturales en la Ciudad de México (FONADEN CDMX).
El Fondo fue el primero en su tipo en el país y se anticipó a la publicación de la Ley de Disciplina Financiera de las Entidades Federativas y los Municipios publicada en abril de 2016, que exige a los estados que los excedentes derivados de los ingresos de libre disposición (ingresos locales y de las participaciones federales) deben destinarlos, y a la atención de desastres y a la caída de ese tipo de ingresos.
Sin embargo, el 1 de septiembre del año en curso se publicó una modificación a dichas reglas que agregaron que los recursos del Fondo se usarían para mitigar el impacto de emergencias y desastres naturales en las finanzas públicas de la CDMX y a compensar la caída de ingresos de libre disposición
Este fondo está reconocido por la agencia calificadora de crédito Fitch Ratings como pionero y ejemplo de buenas prácticas financieras.
Recientemente las calificadoras de crédito Moody´s y Fitch determinaron que el daño económico por el terremoto del pasado 7 de septiembre sería limitado, pues el epicentro se había registrado lejos de la capital mexicana.
No obstante, el terremoto de hoy 19 de septiembre, con epicentro en Puebla, sacudió a la Ciudad de México entidad donde se concentra gran parte de la actividad económica del país. Los daños económicos no han sido cuantificados.
El PIB de la capital mexicana es de 2.5 billones de pesos, 16.4% del PIB nacional en 2015, de acuerdo a cifras del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi).
Fuente: Expansión
