El ISSSTE, que dirige José Reyes Baeza Terrazas, recibió el Premio Nacional Administración Pública-2016, en su categoría Primer Grado, distinción que otorga la Secretaría de la Función Pública (SFP), por el proyecto denominado “Mayor Calidad y Mejor Trato en los Servicios de Urgencias del Instituto en la Ciudad de México”.
Arely Gómez González, titular de la SFP, entregó al equipo ganador una medalla conmemorativa de oro del galardón, diploma y un cheque por 85 mil pesos por ser acreedores al Primer Grado, en presencia del coordinador administrativo de la Presidencia de la República, Carlos Alberto Ramírez Velasco; del titular del Instituto Nacional de Administración Pública, Carlos Reta Martínez, así como del director general del ISSSTE.
¿Quiénes integraron el equipo?
Salvador Ortíz Barrón, Fabiola Aguilar Barragán, Pedro Pablo Vera Maldonado y Pedro Enrique Bartilotti Rodríguez, quienes están adscritos a la Subdirección de Atención al Derechohabiente del Instituto.
Ortíz Barrón detalló que los servicios de urgencias representan una de las áreas más sensibles en materia de atención médica ante la pérdida súbita del estado de salud de una persona, por lo que el ISSSTE promovió el desarrollo e implementación de un modelo de atención integral dirigido a pacientes y sus familias en áreas de urgencias de ocho unidades hospitalarias de la Ciudad de México de segundo y tercer nivel.
Agregó que el programa otorga mayor calidad y mejor trato en los servicios de urgencias en la capital del país, aprovecha el talento humano, así como las tecnologías de la información y comunicación para brindar información asertiva y oportuna, fomentando simultáneamente la participación ciudadana en la evaluación de los servicios otorgados.
El programa en 2016:
- Benefició en la Ciudad de México a un millón 46 mil 800 usuarios; abatió el número de inconformidades captadas por maltrato, desinformación y deficiencia administrativa e incrementó el número de felicitaciones recibidas en los servicios de urgencias en un 95%.
- El nivel de satisfacción percibida por los derechohabientes se elevó en un más en más de un 30%.